Muchas veces, cuando entramos a un espacio que nos inspira armonía, en algunas ocasiones nos podemos preguntar cuál es la razón de esa sensación. Las expertas del orden, entre ellas Marie Kondo, apoyan la teoría de que las luces indirectas y de un tono cálido, aportan más armonía y tranquilidad. Esto es una realidad que, a lo largo de estos años, se ha estudiado y existen razones consistentes que lo demuestran. A través de algunos trucos y consejos que he recogido en este artículo, puedes encontrar ideas y trucos para transformar tu casa en un lugar acogedor.
Al igual que existe el truco de los expertos en Maisons du Monde para montar un rincón de lectura en los pisos más pequeños, crear un entorno cálido es apto para cualquier hogar. Sigue estos trucos y podrás transformar cualquier estancia de tu casa en un mar de calma y tranquilidad.
Los estudios que apoyan la teoría de la luz en hogares
Por un lado, estudios como el de la Universidad de Guangzhou, de 2021, estudiaron cómo la temperatura de luz afectaba a la percepción emocional. Descubrieron que cuando las personas se encuentran en un entorno donde la temperatura de color es baja -lo que viene a ser cálida- había un sesgo negativo menor. Al contrario, cuando se sometían a luces frías -de más de 6.500K- la percepción emocional era más negativa.
Respecto a la luz indirecta o directa, también existen estudios que demuestran que la elección puede afectar a las emociones y la actividad cerebral. Un estudio de Y. B. Shin en 2015 exploró cómo el cerebro se activa según la luz a la que se expone. Encontró que la iluminación indirecta tenía efectos diferentes en la activación cerebral y en las respuestas emocionales que la luz directa. Así, se sugiere que no solo el color sino la forma en que la luz incide importa para el bienestar emocional.
Mientras que una luz indirecta y cálida relaja emocional y cerebralmente, una luz fría y directa puede aumentar la tensión emocional y la productividad, según cómo se distribuya la luz en la estancia.
Escoge diferentes zonas de la casa para escoger un tipo de luz u otro

Una vez establecidas las diferencias, las expertas del orden tienen claro qué luz poner en cada lugar de la casa. La entrada de tu casa es la carta de presentación para tus invitados. Para crear una atmósfera cálida, usa bombillas de 2.700 K y no te limites a poner una lámpara de techo, puedes cambiarla por lámparas de mesa, o de pared, cuyo diseño desvía la luz hacia el techo.
Este consejo lo puedes repetir en otras estancias como el salón, el dormitorio y los pasillos y poner lámparas de pie que además decoran y la convierten en lugares más acogedores.

En el caso de la cocina y el baño, se pueden combinar, si lo permite el espacio, dos tipos de luces. Si sueles pasar mucho tiempo en esta estancia. Puedes añadir paneles led integrados en la parte inferior de los muebles con luz fría, para tener una luz que permita una precisión mayor. Del mismo modo, en el mismo espacio, puedes añadir rincones que convierten la estancia en cálida.
La única estancia de la casa en la que se recomienda luz fría
Como ya he citado anteriormente, hay lugares donde la luz fría no solo ayuda, sino que aumenta la productividad y el rendimiento. El estudio liderado por Reza Kazemi, de 2018, explica que para algunas tareas, como escribir, editar o pasar horas en el ordenador, la luz fría -de 6.5000K- aumentaba el rendimiento y la eficiencia del trabajo.

Por lo que, si teletrabajas en casa o tienes un despacho o un taller de manualidades, una luz fría es la mejor opción. A la hora de escoger entre directa o indirecta, la indirecta podría evitar dolores de cabeza o fatiga, ya que no llega directamente al ojo humano, sino que es más difusa.
Otros trucos que aportan más armonía y tranquilidad al hogar, más allá de la luz
Crea un ambiente relajante con aromas otoñales

Los aromas tienen el poder de transformar el ambiente de un hogar. Opta por fragancias otoñales como canela, vainilla o madera de cedro. Utiliza difusores de aceites esenciales o inciensos suaves para llenar tu casa de calidez y bienestar.
Textiles que invitan al descanso
Coloca mantas suaves y cojines en tonos cálidos en tu salón. Estos elementos no solo aportan confort físico, sino que también añaden un toque decorativo que invita al descanso. Juega con diferentes texturas y colores para crear un espacio acogedor y personal.
Detalles cálidos en el baño

No olvides el baño al pensar en la calidez de tu hogar. Pequeños detalles como velas aromáticas, toallas esponjosas o una alfombra suave pueden transformar este espacio en un lugar de relajación y confort.
Implementar estos simples cambios hará que tu hogar se sienta más cálido y acogedor durante los meses de otoño e invierno, sin necesidad de realizar grandes inversiones. ¡Disfruta de la temporada con un hogar lleno de confort y estilo!