En el vasto universo de la cosmética, donde cada día emergen nuevos productos prometiendo resultados milagrosos, hay quienes prefieren la confianza de lo clásico. Una de estas personas es Carmen Lomana, empresaria y figura pública, quien a sus 77 años sigue apostando por la crema Nivea de la icónica lata azul como su aliado de belleza. Estamos hablando de la crema de la lata azul de toda la vida, que cuesta poco y vale mucho.
Carmen Lomana es conocida por su elegancia y su disciplina en el cuidado personal. Además de conocer su postre favorito en verano, ligero y bajo en calorías, tiene un truco para alisar las arrugitas que nacen del labio superior. Su piel, siempre radiante y tersa, es testimonio de su dedicación a una rutina de belleza sencilla pero efectiva.
La crema de toda la vida que no defrauda y tiene muchísimos usos
Algunas mujeres sienten la necesidad de probar aquellos productos como la crema Nivea de la lata azul para mejorar su aspecto. En lugar de dejarse seducir por las últimas tendencias en cosmética, Lomana confía en la eficacia probada de este clásico de la hidratación.

La crema Nivea, con su fórmula centenaria que apenas ha cambiado desde su creación en 1911, se ha convertido en un básico en el neceser de muchas generaciones. Carmen destaca su uso para mantener la piel de sus labios suave y libre de arrugas, especialmente en el área conocida como "código de barras", donde las líneas de expresión suelen hacerse más evidentes.
"La Nivea de la lata azul es perfecta para nutrir y proteger", comenta socialité. Su textura rica y su inconfundible aroma son parte de su rutina diaria, aplicándola con un suave masaje por la noche para permitir que actúe mientras duerme, dejándole una piel más lisa y rejuvenecida al despertar.
La crema de Nivea de la lata azul tiene infinidad de usos
Este producto, que ha sido un pilar en el cuidado de la piel durante décadas, es valorado por su versatilidad. Además de su uso en el rostro, Carmen, y muchas otras mujeres, lo aplican en manos, codos y rodillas para combatir la sequedad. Su fórmula a base de eucerit, pantenol y glicerina crea una barrera protectora que retiene la humedad, asegurando una piel hidratada y elástica.

Lo mejor es que es una crema de toda la vida para todos los bolsillos. Nació como un bálsamo multiusos que servía absolutamente para todo y todos. Y es que en más de 100 años que tiene la marca, sigue siendo una de las cremas con olor a limpio más usadas en el mundo por su eficacia y precio. Por solo 5,70 euros tienes la lata azul de 400 ml.
Alternativas a la crema de Nivea que combaten las arrugas de la edad

Además de la lata azul, las crema anti edad con efecto "buena cara" son un apartado de la cosmética que más ha avanzado en los últimos años. Además de la crema de la lata azul, Nivea tiene el sérum Rejuvenecedor 'Cellular Epigenetics'. Su fórmula combina Epicelline con tres tipos de ácido hialurónico (macro, medio y micro), que hacen que sea un producto muy efectivo contra el envejecimiento. Además de notar una reducción de las arrugas al 20 %, "se transforma en una piel más fuerte y resistente a los factores externos del envejecimiento", aseguran los expertos de Nivea. El frasco cuesta unos 15 euros.

La crema hidratante de Neutrogena 'Collagen Bank' puede ser otro aliado de las arruguitas en el labio. Es capaz de hidratar y ayudar a preservar el colágeno, mejorando la apariencia de las arrugas del labio. Su tecnología de micropéptidos y bakuchiol vegetal favorece una piel más firme y luminosa. Su textura ligera se absorbe rápido, dejando el contorno suave y con aspecto rejuvenecido cada día de uso. Esta crema hidratante tiene un precio de unos 25 euros.

Otra crema que usan las mujeres maduras muy efectiva es la crema multiactiva de Xhekpon para ojos y labios combina Trylagen, ácido hialurónico y ceramidas para suavizar arrugas y mejorar la hidratación. Refuerza la barrera cutánea, aumenta la elasticidad y aporta un efecto de relleno visible. Su fórmula revitaliza la zona, dejando la piel más firme, lisa y rejuvenecida. El contorno tiene un precio de unos 15 euros.
Para Carmen, la belleza no está en lo complicado sino en lo efectivo. Funciona y es así de simple, asegura, reafirmando su confianza en este producto que ha resistido el paso del tiempo y sigue siendo un favorito entre quienes valoran la calidad y la tradición en el cuidado de la piel.